Tras golpearse la cabeza un día, Katarina, la hija del Duque Claes, de repente recuerda todas las vivencias de su vida pasada, es decir cuando era una adolescente japonesa. Justo antes de su prematura muerte, esta chica recuerda que estaba viciada a un juego otome… ¡y resulta que es exactamente como el mundo en el que está viviendo ahora!